domingo, 25 de marzo de 2012

DEMASIADO PRONTO, DEMASIADO INTENSO.


Una vez más, rechazando de entrada la acusación de ser innecesariamente repetitivos, hemos de decir que pocas veces una derrota tiene un sabor tan amargo. Sin embargo, aquéllos que gentil o interesadamente crean, o pretendan hacer creer que los únicos que ahora mismo tienen sabor a cobre en la boca son los dirigentes del PP de Andalucía, se equivocan. Y lo que es peor, se equivocan interesadamente.

Porque definitivamente, cuando ni por estas se logra una mayoría absoluta, verdaderamente, algunos creemos llegado el momento de hacérselo mirar.

Hacérselo mirar porque, verdaderamente el que tenga que salir la número dos del PP, Sra. De Cospedal, a decir que a pesar de todo ellos consideran histórico el hecho de haber ganado por primera vez en Andalucía, no hace sino encerrar un dardo envenenado. El dardo de ¿Verdad ARENAS que no vas a dar lugar a una quinta derrota?

Entramos ahora en la guerra de los tiempos. ARENAS ya ha dado una pista. En el discurso de aceptación de resultados ha dado las gracias directamente a su Presidente de Partido, y a la sazón Presidente del Gobierno D: Mariano RAJOY. Y yo me pregunto, ¿gracias por qué?

Gracias por desarrollar una política basada en la falacia, cuando no abiertamente en la mentira. Una política que contribuye de manera directa a separar cada vez más al administrado de la administración, puede que ahí radique parte del castigo de la vergonzante participación de Asturias.

Gracias por poner en práctica la única verdad taxativa que conoce, la de una ideología trasnochada, que sigue creyendo que el Capitalismo trasnochado ha de salvar al Mundo, mediante la imposición de una Justicia Retributiva injusta donde la haya-

Gracias por recordarnos lo que significa vivir en la cuerda floja de la amenaza. Amenaza a no saber si mañana tendremos trabajo, si nos bajarán el sueldo, si el amo, de manera unilateral, podrá volver a sacar el látigo.

Pero gracias de verdad, por demostrar lo cerca de la estulticia que realmente están. Una estulticia que les ha llevado a pensar que esconder los Presupuestos Generales del Estado realmente les iba a servir de algo. De verdad, la sonrisa de la Sra Sáenz de SANTAMARÍA, y las apariciones de la Sra. Ministra de Trabajo convierten en infructuoso todo esfuerzo al respecto.

Pero sobre todo, sobre todo, gracias por devolvernos a Europa, y hacerlo como lo han hecho, arrojándonos al rincón de pensar, donde como a los niños se nos han explicado cosas que son obvias. Cosas como que uno no puede llegar el último, y pretender ponerse el primero, como ocurre con las ofertas de telefonía móvil. O cosas aún más elementales como saber que cuando uno se tira un farol, al menos tiene que saber que está jugando al póker, no al mus.

Así que, de verdad, gracias a toda esa Derecha que, una vez más, ha puesto de manifiesto que para que en España gobiernen, ha de ser imprescindiblemente mediante la obtención de una mayoría absoluta.

Evidentemente, no estamos en un escenario en el que uno pueda pedir que le devuelvan su voto. Pero, verdaderamente, ahora son otros los que van a tener que hacer ingeniería matemática para comprender el resultado de las elecciones.

En una palabra, las cuentas dejan de cuadrar. Demasiado pronto, demasiado intenso.

Luis Jonás VEGAS VELASCO.

Una vez más, rechazando de entrada la acusación de ser innecesariamente repetitivos, hemos de decir que pocas veces una derrota tiene un sabor tan amargo. Sin embargo, aquéllos que gentil o interesadamente crean, o pretendan hacer creer que los únicos que ahora mismo tienen sabor a cobre en la boca son los dirigentes del PP de Andalucía, se equivocan. Y lo que es peor, se equivocan interesadamente.

Porque definitivamente, cuando ni por estas se logra una mayoría absoluta, verdaderamente, algunos creemos llegado el momento de hacérselo mirar.

Hacérselo mirar porque, verdaderamente el que tenga que salir la número dos del PP, Sra. De Cospedal, a decir que a pesar de todo ellos consideran histórico el hecho de haber ganado por primera vez en Andalucía, no hace sino encerrar un dardo envenenado. El dardo de ¿Verdad ARENAS que no vas a dar lugar a una quinta derrota?

Entramos ahora en la guerra de los tiempos. ARENAS ya ha dado una pista. En el discurso de aceptación de resultados ha dado las gracias directamente a su Presidente de Partido, y a la sazón Presidente del Gobierno D: Mariano RAJOY. Y yo me pregunto, ¿gracias por qué?

Gracias por desarrollar una política basada en la falacia, cuando no abiertamente en la mentira. Una política que contribuye de manera directa a separar cada vez más al administrado de la administración, puede que ahí radique parte del castigo de la vergonzante participación de Asturias.

Gracias por poner en práctica la única verdad taxativa que conoce, la de una ideología trasnochada, que sigue creyendo que el Capitalismo trasnochado ha de salvar al Mundo, mediante la imposición de una Justicia Retributiva injusta donde la haya-

Gracias por recordarnos lo que significa vivir en la cuerda floja de la amenaza. Amenaza a no saber si mañana tendremos trabajo, si nos bajarán el sueldo, si el amo, de manera unilateral, podrá volver a sacar el látigo.

Pero gracias de verdad, por demostrar lo cerca de la estulticia que realmente están. Una estulticia que les ha llevado a pensar que esconder los Presupuestos Generales del Estado realmente les iba a servir de algo. De verdad, la sonrisa de la Sra Sáenz de SANTAMARÍA, y las apariciones de la Sra. Ministra de Trabajo convierten en infructuoso todo esfuerzo al respecto.

Pero sobre todo, sobre todo, gracias por devolvernos a Europa, y hacerlo como lo han hecho, arrojándonos al rincón de pensar, donde como a los niños se nos han explicado cosas que son obvias. Cosas como que uno no puede llegar el último, y pretender ponerse el primero, como ocurre con las ofertas de telefonía móvil. O cosas aún más elementales como saber que cuando uno se tira un farol, al menos tiene que saber que está jugando al póker, no al mus.

Así que, de verdad, gracias a toda esa Derecha que, una vez más, ha puesto de manifiesto que para que en España gobiernen, ha de ser imprescindiblemente mediante la obtención de una mayoría absoluta.

Evidentemente, no estamos en un escenario en el que uno pueda pedir que le devuelvan su voto. Pero, verdaderamente, ahora son otros los que van a tener que hacer ingeniería matemática para comprender el resultado de las elecciones.

En una palabra, las cuentas dejan de cuadrar. Demasiado pronto, demasiado intenso.

Luis Jonás VEGAS VELASCO.

miércoles, 7 de marzo de 2012

DE LA MUJER, LA PERSONIFICACIÓN DE UN CAPRICHO DIVINO.


Miro a mi alrededor de nuevo, y me sorprendo de este mundo que me rodea. Me sorprendo de sus gentes, de sus costumbres. De la vida que llevan, y de los abusos que cometen desde el poder que les da creerse en una posición distinta de la que gozan el resto de criaturas de la creación, en tanto que posicionados de cara a creerse capaces de entender a su creador.

Sin embargo, una de las cosas que me lleva directamente a rebelarme contra este mundo, y más concretamente contra alguna de las aberraciones que en el mismo se cometen, es aquella que se pone de manifiesto por medio del acto bochornoso en el que un hombre le pone la mano encima a una mujer.

Si la violencia es la manifestación externa de la ira, la perseverancia impía de la frustración; dirigir esta contra la mujer es perpetrar el más indigno de los actos, aquél que en esencia más aleja al varón de su propia condición, en la medida en que le impide manifestarse proclive a acceder a una de las mayores concesiones a las que puede aspirar un hombre como tal, ser digno del amor respetuoso de una mujer.

La mujer es la transcripción real del arte etéreo de Dios. Es la manifestación ordenada de la existencia de éste. Ningún hombre puede, después de haber disfrutado de la gracia serena que sólo puede darle una mujer, dudar de la existencia de una mente capaz del orden absoluto, la causa, es evidente, una mujer es la demostración clara e irrefutable de que en el Universo ha de haber un orden superior, de no ser así el simple caos no podría haber dado lugar a una forma de belleza tan inexcusable.

La mujer es inexcrutable en tanto que una mirada suya puede aportar el cielo, o condenar al infierno. Es codiciada, en tanto que de sus promesas se puede extraer el elixir de la vida, en forma de eterna pregunta, o la convicción del deseo de la muerte, una vez comprobada la imposibilidad de alcanzar ese cielo tal vez falsamente prometido. Es la personificación del laberinto de la vida, ese del que sin ayuda externa no se puede salir.

La mujer es creación creadora. En tanto que madre, comprende como nadie la soledad del creador, ya que accede de primera mano a lo que supone asumir la forma del sacrificio absoluto, aquél que comienza aceptando la pérdida a partir del mismo instante en que la nueva vida ve la luz.

La mujer es creación creada. En tanto que amante, es capaz de darse hasta el más allá, hasta la proximidad propia del paroxismo, ese que procede de la posesión de todas las respuestas, a la espera de hallar a alguien competente que sea capaz de formular las preguntas adecuadas.

La mujer es creación frustrada. En tanto que elemento superior, por poseer la esencia del amor infinito, sabe que el suyo habrá de ser el mayor de los sacrificios, el que procede de saber que sus demandas más íntimas nunca podrán ser satisfechas.

Y entonces, la desazón absoluta, la que procede de la desdicha de comprender que su sino pasa por la desesperación máxima, aquella que se manifiesta en el abandono cínico de los hijos, o en la bofetada vulgar del agresor.

Cuando un hombre golpea a una mujer, atenta de manera imperdonable contra el orden natural de las cosas. Las manos de un hombre, si bien hoy están destinadas a la elaboración de complejas tareas, en el principio de los tiempos estuvieron destinadas tan solo a un fin, el de acariciar y dar forma al excelso templo en el que se convierte el cuerpo de toda mujer. Manifestación de todo lo bello en tanto que sublime, el cuerpo de la mujer ser convierte en un nuevo arca, un arca que, como aquel, el de la alianza, unifica en torno a sí mismo los compromisos suscritos en este caso entre la Naturaleza y el Hombre, compromisos destinados a promover la existencia de ambos, mediante el cuidado mutuo.

Por eso, cuando una mujer llora, lo hace la Naturaleza, lo hace la vida, lo hace la belleza, lo hace la dignidad.

Cuando una mujer llora, lo hace la esperanza, la comprensión, el deseo.

Cuando una mujer llora, sus lágrimas se forman con el cristal del cielo, aquél que se fragmenta sólo una vez, como le ocurre a la confianza.

Cuando una mujer llora, llora el mundo, porque sabe que ya nada podrá ser digno de volver a ser, como cuando una mujer sonríe.

Luis Jonás VEGAS.

lunes, 5 de marzo de 2012

DE CUANDO EL CAMBIO POR LA MERA OPCIÓN DEL CAMBIO, NO NOS LLEVA MÁS QUE A LA REDUNDANCIA EN EL ERROR.


Una vez más, la certeza de las primas me lleva a despertar, haciendo presa en mí la extraña certeza de que este día no va a ser como los demás. Así, la sorprendente presencia de los almendros, que como vanguardias de la primavera, aparecen ya floridos, convierten en casi inevitable el hecho de que en cualquier momento tropiece mi camino con la primera mariposa, la cual, según las calendas de la saturnalia, encierra el alma de aquella ninfa que, víctima del pecado de la soberbia, renunció a su parte cognisciente en pos de reforzar su componente concupiscible.

Semejante pensamiento, aparentemente ajeno a la actualidad, se muestra en cualquier caso certero de cara a conjugar una más de las ya múltiples explicaciones que se pueden verter de cara a intentar hacer comprensible el actual estado de las cosas.

En la medida en que el tiempo malgastado, casi cinco años son ya demasiados como para continuar buscando en la banalidad, respuestas a éstos nuestros problemas; puede que ya vaya siendo momento de empezar a asumir el hecho de que si bien los sinsabores del tiempo que nos ha tocado vivir pueden tener su origen en malas artes procedimentales procedentes del ejercicio desordenado de los que tienen, han tenido y probablemente tendrán durante muchos años la sartén por el mango; no resulta sino de género más responsable, comenzar a buscar otros orígenes, en causas probablemente mucho más profundas.

El plazo de vigencias de las excusas meramente pragmáticas, o sea las que podían partir de la acción negativa, atribuible este carácter tanto a al perversión como a la mera incompetencia; ya ha caducado. Por ello, empieza a ser ya imprescindible el que comencemos a indagar en campos más profundos, y por ende más cercanos a las estructuras que sustentan el Edificio de nuestro Sistema, a la caza de los principios, sean éstos tanto procedimentales como conceptuales, en los cuales albergar la génesis del problema.

Una vez planteada ésta necesidad de catarsis, los siguientes pasos parecen cuando menos más sencillos, ya que ahora podremos aplicar la óptica de lo analítico y lo individual, sobre un terreno que hasta ahora quedaba imprescindiblemente englobado en la fenomenología de lo social, impidiendo con ello la adopción de medidas lo suficientemente precisas como para garantizar un mínimo de apunte.

Con ello, afinando la puntería, podremos rechazar de plano medidas experimentales, que hasta la fecha han sido las únicas que parecen han sido llevadas a cabo, si bien la experiencia nos demuestra que con nulos o incluso nefastos resultados.

Lo excesivo del ancho de banda con el que en principio se han tratado los asuntos, han convertido en erróneas todas a cuantas conclusiones se ha llegado en tanto que el teatro de operaciones del que las mencionadas partían, era evidentemente erróneo.

Hoy resulta imprescindible adoptar una nueva óptica. Hay que ver las cosas desde el aspecto individual, haciendo del procedimiento analítico el valuarte desde el que auscultar la lontananza en pos de un puerto más seguro en el que arriar las naves.

Que nadie se confunda. No estoy diciendo que la búsqueda de soluciones particulares, de carácter netamente individualistas o perecederas en tanto que excluyentes; sea la solución. Semejantes procedimientos, que constituyen la piedra de toque de ideologías y políticas que, hoy por hoy copan el espectro ideológico a la par que gubernamental del mundo, se están mostrando igual si no más inútiles que aquéllas otras, en un principio más propensas al aglutinamiento conceptual; a las que han ido desbancando del poder, no lo olvidemos enarbolando la para nada brillante cuando no incluso soez bandera de las acusaciones de causalidad respecto de los problemas suscitados.

Entonces ¿Cuál es el concepto al que podemos apelar en términos sociales y de comunidad, que por otro lado tiene su origen y constitutivo fundamental en la gnosis individual?

La respuesta es evidente, y sin duda planea hace rato por las cabezas de algunos. La responsabilidad. La responsabilidad, esa magna cuestión, intrínsecamente presente en el Hombre. Carácter netamente diferenciador. Individual en su naturaleza, cada individuo es exclusivo responsable de sus decisiones; si bien es absolutamente social en su composición final, la sociedad es sobre la que revierte siempre el resultado de las acciones promovidas desde la individualidad de cada alma que actúa.

Sólo desde la responsabilidad, el hombre de esta época que nos ha tocado vivir, podrá decidir sobre la conveniencia o no de algunas de las cuestiones fundamentales que se están poniendo sobre la mesa. Pérdida de derechos fundamentales, retrocesos sociales, restricción de libertades, demolición del Estado del Bienestar…son circunstancias que hacen acto de presencia enmarcadas en una única realidad, la que resulta de comprender que nada, absolutamente nada, volverá a ser igual.

Y desde esa única certeza, es desde la que cada uno, desde sus vivencias como individuo, y su experiencia como integrante de una realidad mayor, habrá de tomar sus decisiones.


Luis Jonás VEGAS. eidos de marzo de 2012.